¿Qué es lo primero que se nos viene a la mente al pensar en México? Tacos, tequila y día de muertos. Y si bien esta no es la manera más realista de describir al país, algo es cierto, la primera palabra se refiere a su comida; declarada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO desde 2010, la gastronomía mexicana siempre es tema de conversación entre fanáticos de platillos tradicionales e internacionales.
Y ya sea que conozcamos a México por ser el sexto país más visitado del mundo de acuerdo a la Organización Mundial de Turismo, por sus magníficas maravillas naturales, sus playas paradisíacas, sus misteriosos cenotes, por ser uno de los países con mayor diversidad del mundo, por guardar una historia cultural impresionante, o por ser hogar de habitantes felices, amables y cálidas; si algo dirán las personas que visitan esta hermosa nación es: ‘¡Pero que deliciosa es la comida, aunque cuidado cuando te dicen que la salsa no pica!’ De esta manera, te invitamos a conocer México en base a su comida, estos son los 10 platillos básicos para conocer la gastronomía mexicana.
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Mole
Remontando su origen a la época prehispánica y llevando como nombre un término náhuatl que significa: ‘varios de tipos de salsas preparadas a partir de chiles y otros ingredientes’, el Mole es de los platillos más reconocidos dentro de la comida mexicana; pero, ¿por qué? Dicen las leyendas, y las mejores expertas del tema, las abuelitas mexicanas, que cuando el Mole se preparó por primera vez fueron necesarios alrededor de 100 ingredientes.
Y aunque su receta ha evolucionado con el tiempo y se estima que existen alrededor de 50 tipos de moles, algunos de los ingredientes que nunca faltan son: chile mulato, chile ancho, chile pasilla, chipotle, cacahuate, chocolate, jitomate, almendras y diversas especias. No le tengas miedo a lo desconocido y prueba esta maravilla mexicana tradicional, te recomendamos probar el tradicional, el poblano y el verde.
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Pozole
México tiene años de historia, llena de diversos sucesos históricos que lo marcaron hasta evolucionar a lo que conocemos hoy, y gracias a ellos, la comida mexicana es igual de diversa. El Pozole es un platillo tan arraigado a la cultura de esta nación debido al impacto que tenía desde la época prehispánica, donde era un honor prepararlo por la familia de los soldados de la antigua Tenochtitlan (México antes de la conquista).
La receta tradicional para el pozole blanco, aquel más conocido y preparado en el país, suele ser una tipo sopa con carne de cerdo, maíz pozolero (el cuál es un maíz especial, más grande y blanco que el común), lechuga, rábanos y aguacate. No olvides probarlo también acompañándolo con tostadas (tortillas horneadas) y con crema.
Chiles en Nogada
Siendo el platillo representante de la Independencia de México por sus raíces mestizas y creado por monjas agustinas del convento de Santa Mónica en Puebla para celebrar su libertad, los Chiles en Nogada son un platillo que consiste en un chile poblano relleno de carne de res y puerco, mezclados con plátano, manzana, pera, durazno, y bañado con una salsa de nuez de castilla y algunas semillas de granada.
Visitar México en septiembre, el mes de su Independencia, es una experiencia que se debe de vivir al menos una vez ya que el lugar se llena de sus banderas, colores vivos, fuegos artificiales y shows de baile tradicional, ¿y qué mejor manera de disfrutar al máximo si no es comiendo unos Chiles en Nogada, uno de sus platillos más deliciosos? En estas épocas hasta le ponen una mini banderita al momento de servirlo.
Tamales
No es secreto que México es la cultura del maíz, y si nos pusiéramos a contar la cantidad de platillos que se preparan con este ingrediente, nunca acabaríamos. Sin embargo, la mayoría de personas piensan erróneamente que solo se consume a base de tortillas; pero los Tamales, son prueba de lo contrario.
Los Tamales se elaboran con masa de maíz y, algo similar a lo que sería una empanada, se rellenan con carne, verduras, chiles, mole (mencionado anteriormente) , hierbas y a veces hasta ingredientes dulces. Es un platillo bien divertido de descubrir porque puede ser salado (tamales verdes, rojos, oaxaqueños, verdes, y más), o dulce, donde el más conocido se torna de color rosita y sabe exquisito en las mañanas acompañándolo con un buen atole (bebida mexicana a base también de maíz).
Cochinita Pibil
Lo más probable es que si te gusta México hayas escuchado de los famosos cenotes, pozos de agua dulce de gran profundidad, mayormente encontrados en el estado de Yucatán. Pero estas albercas naturales no son el único elemento por el que vale la pena visitar esta parte del país, su platillo tradicional más reconocido, la Cochinita Pibil, es un must al pasear por allí.
No te dejes engañar por su color rojo anaranjado vivo, si bien pareciera que es un platillo con un chile que te enchilará por siempre, en realidad esta carne de cerdo tiene este color característico por el achiote, una semilla que fue considerada planta sagrada en los tiempos prehispánicos de México y muy popular en la comida yucateca. Esta carne puede comerse en tacos, tortas (algo así como un sandwich mexicano) o panuchos (tortillas de maíz fritas con frijol), pero suele acompañarse con cebolla morada, limón y cilantro.
Chilaquiles
¿Qué tal si empezamos con los platillos con tortillas? México se caracteriza por tener personas muy creativas en todos sus ámbitos, y la gastronomía no es la excepción. Uno de los desayunos por excelencia para cualquier mexicano son los Chilaquiles, tortillas de maíz fritas cortadas en triángulos acompañadas de algún tipo de salsa, crema y queso, además de incluir pollo, huevo, o carne.
Existe un debate entre la población mexicana para decidir cuáles son los mejores chilaquiles, si los verdes o los rojos, pero eso sí, ambos son deliciosos y siempre son una excelente opción para iniciar bien el día. La variedad de este platillo no se limita a solo dos tipos, existen muchísimos que pueden probarse en cada parte de México.
Sopes
En lugar de cortar la tortilla en triángulos, ahora la tomaremos junto al frijol como ingredientes base para crear el siguiente platillo: los Sopes. Aunque son considerados más como antojitos que como una comida completa, estos clásicos de la cocina mexicana son deliciosos de cualquier forma en que los combines.
Los sopes se diferencian de un taco debido a que la tortilla tiene mayor grosor y su borde está levantado (cómo si alguien lo hubiera pellizcado), y después de agregarle su base característica de frijol, la persona puede ponerse creativa para poner más ingredientes. Ya sea con pollo, carne de cerdo, hongos, papas, queso, o incluso cochinita pibil; estas delicias siempre saben como a casa para los mexicanos.
Quesadillas
Si doblas un tortilla y le agregas queso tienes como resultado una Quesadilla, un platillo mexicano sencillo pero lleno de sabor; y aunque su preparación puede sonar muy simple, hay miles de maneras de disfrutarlas. Sean al comal, fritas o incluso calentadas en el microondas, de harina de maíz o de trigo, de color amarillo o moradas, existen miles de maneras de preparar unas ricas quesadillas.
Aunque junto a la tortilla, el queso es su ingrediente principal, también se acostumbra agregar diversos guisos, tales como flor de calabaza, pollo, carne picada, papa, huitlacoche (un tipo de hongo mexicano), entre muchos más. Algo muy curioso de este platillo es que en Ciudad de México también se sirven quesadillas sin queso, lo que siempre ha sido tema de debate entre foráneos y chilangos (como se conoce a aquellos originarios de la CDMX).
Tostadas
Si en cambio, tomas una tortilla y la fríes o la tuestas hasta que quede rígida y crujiente, tienes la base para preparar unas deliciosas Tostadas. Con orígen indígena pero con una evolución constante desde la llegada de los españoles, comer mínimo dos tostadas se conveirte en un platillo súper completo y exquisito en México.
Pero como ya es costumbre, la tortilla frita no se come sola, si le agregas crema y algún guiso, esta te presenta sabores únicos y una experiencia distinta. Hay tostadas para todos los gustos, de pollo, de carne de cerdo, de pico de gallo, de chicharrón, de pata, entre otros.
Tacos
Y por último, pero no menos importante, el platillo más mexicano; aquel que siempre nos representa, que guarda nuestra cultura y tradiciones, y que debería ser probado por todos, no podemos terminar esta nota sin mencionar a los deliciosos Tacos. Estos son la viva representación de México, casi casi están en el código genético de sus habitantes y es un excelente platillo para compartir.
Para un taco solo se necesita una tortilla, generalmente de maíz, algún tipo de carne, salsa y verdura. El más reconocido a nivel internacional es el taco al pastor, el cual tiene como ingrediente principal carne adobada por achiote (principalmente de puerco), y suele acompañarse con cebolla, cilantro, limón y piña. Los tacos son tan maravillosos que pueden comerse en cualquier momento del día y con casi todos los tipos de carne; así, no puedes irte de México sin haber probado todos los tacos que puedas encontrar.
